jueves, 24 de mayo de 2012
RECTOR CRISTOBAL DE ARAQUE PONCE DE LEÓN
Durante la década de 1653 se
fundó una de las primeras universidades colombianas, el colegio mayor de
nuestro rosario, bajo el mandato del monarca de castilla y por medio del
arzobispo fray Cristóbal de torres se fundó y se proclamo esta institución.
Gracias a los meritos reconocido por la comunidad de nuestra señora del rosario
el sacerdote Cristóbal de Araques Ponce de león, sacerdote que se proclamo y se
estableció como el primer rector del colegio mayor.
El primer rector de esta
institución, el tan reconocido sacerdote Cristóbal de Araque se formo en la
capital en una institución hermana al colegio mayor del rosario, el real
seminario de san Bartolomé donde se preparo como uno de los primeros maestros
de filosofía y bachiller en artes, gracias a sus meritos de estudio fue
reconocido y proclamado como colegial, becado por sus grandes dotes de
estudiante, luego se especializo como licenciado y doctos en cánones. Después
de abordar una gran carrera estudiantil en el semanario fue ordenado como
presbítero o sacerdote y de este modo fue seleccionado como el primer cura de
su ciudad nativa; durante la carrera eclesiástica que Cristóbal de Araque se
destaco como Vicario y Juez eclesiástico.
Durante el año de 1650 se dio
un gran reconocimiento de este por medio de los meritos estudiantiles y
trabajaos eclesiásticos desarrollados, es por esto que el mismo arzobispo Fray
Cristóbal de Torres resalto sus grandes dotes, manifestando el excelente
servicio como sacerdote, delegando su autoridad con el fin de realizar una gira
pastoral que fomentaría su gran trabajo a favor de la iglesia, recorriendo gran
parte de los pueblos de Merida y Yunja.
De este modo al ser reconocido
por los grandes dotes como sacerdote y el gran ejemplo promovido por la
delegación de la autoridad del sumo arzobispo en el año de 1962 fue promovido
como Provisor y Vicario general del Arzobispo; esto le permitió que su nombre
fuera postulado como uno de los principales candidatos a rector del colegio
mayor del rosario, después de dos años de aprendizaje fue instituido como
rector. Gracias al título de rector este fue encomendado a España con el
principal objetivo de redefinir los asuntos esenciales de la contradicción
declarada por la comunidad de los padres dominicanos los cuales se disputaban
la administración del colegio de fray Cristóbal, este permitió, gracias a sus
grandes conocimientos la solución y el establecimiento de un acuerdo que promulgaba,
bajo la merced del consejo de indias el cumplimiento de un acta que declara al
fundador como principal administrador.
En la década de 1667 en el mes de septiembre el tan afamado rector y
gran sacerdote Cristóbal de Araque Ponce de león fallece en Madrid, y poco
antes de a ver sido trasladado a la costas de Cartagena de indias en donde fue
condecorado con la investidura de canónigo de la catedral.
RECTOR JUAN DE MOSQUERA NUGUEROL Y SOTELO
Nació en
Mariquita en 1638, hijo de don Antonio de Mosquera y Ulloa y doña María Sotelo,
su padre se estableció en esa ciudad desde 1614 donde se volvió alcalde
ordinario y provincial de la hermandad gracias a que el cabildo le honró esos
méritos. Su madre María Sotelo era hija del gobernador Francisco de Berrío,
(esta apellidada como Sotelo porque fue criada por Antonio Sotelo). Uno de los
15 Colegiales (más exactamente el X colegial) llamados de primera fundación,
además fue Rector del colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario entre 1666-
11667 y 1673-1676.
Juan de
Mosquera entro al colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario en 1653, los
primeros 15 colegiales solo eran personas de sangre preciosa, es decir, los
hijos más ilustres, debían venir de familias prestigiosas y por lo menos ser
españoles; Juan de Mosquera recibió el X lugar porque los primeros lugares eran
para colegiales que ya tenían conocimiento alguno. Como fue uno de los primeros
colegiales su educación fue dada por los padres dominicos y se graduó de doctor
en teología.
Después de
terminar su educación varios colegiales fueron nombrados por Fray Juan de
Castañeda para ser catedráticos, Mosquera Nuguerol sustituyó el puesto de él
joven maestro Fernando de Mendoza en la cátedra de filosofía, desde 1665 hasta
1668 dicto la cátedra de Teología siendo un excelente maestro.
SU PRIMERA
RECTORIA(1666-1667)
El 18 de
diciembre de 1666 fueron las elecciones en el colegio Mayor y Juan de Mosquera
queda escogido, es el primer colegial en convertirse Rector. A su llegada al
mandato debió enfrentar un problema gravísimo: Una epidemia de viruela había
atacado a los colegiales, entonces por esto el colegio tuvo que correr con
todos los gastos de la medicina para curarlos, además el 23 de septiembre de
1667 murió Don Fernando de Mendoza y Espeleta el tercer colegial de fundación y
del cual Mosquera era su sucesor en la cátedra de teología moral.
El colegio
Mayor corrió con todos los gastos pero no pudieron salvarlo, en este tiempo el
colegio tuvo una decadencia económica un poco fuerte, al acaba su año electoral
Mosquera es reemplazado por otro colegial de primera fundación llamado Enrique
de Caldas Barbosa y a raíz de que el catedro Mendoza murió este nuevo rector
asciende a la cátedra prima que Mendoza dictaba.
Nuguerol
sigue como Regente de estudios y siempre estuvo presente en todas las actas que
se firmaran.
SU SEGUNDA
RECTORIA1673- 1676)
En el año de
1673, a solicitud de los colegiales, el presidente del Nuevo Reino de Granada,
Don Melchor de Liñán y Cisneros, autorizó que el rector Juan de Mosquera
Nuguerol estuviera en la rectoría por 3 años, luego en 1780 los colegiales
volvieron a solicitar esto para el nuevo rector Don Francisco Castillo de la
Concha y desde ahí se decidió que el periodo de rector durara 3 años.
En este
mismo periodo de rectoría Mosquera de Nuguerol era cura de la parroquia de San
Victorino en Santafé y seguía siendo catedrático prima de sagrada teología y
regente de estudios. El 8 de noviembre de 1763 el rector solicito una donación
a la corona española pues el colegio Mayor podría haber quedado en la ruina.
Durante su
rectoría el presidente de Nueva Granada expidió varios títulos de colegiales
formales y en 1675 la real audiencia nombro 2 colegiales formales. Cuando
finalizó su periodo de rector en 1676 siguió en la parroquia de San Victorino
en Santafé y, además siguió como catedrático de Teología y regente de estudios.
Fue una
figura de gran importancia en el Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario,
un magnifico catedrático y estaba involucrado en todos las actas y cambios que
iba teniendo el colegio hasta mediados de 1677 año en el cual dejo de ser
catedrático.
BIBLIOGRAFIA
- HERNANDEZ DE ALBA,
Guillermo. Crónica del Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario. Méndez
Rozo, Demetrio (Ed.) Tomo I. Ciudad de Bogotá: Editorial Centro, 1938.
- GUILLÉN DE IRIARTE, María
Clara. Rectores y rectorías del colegio Mayor de Nuestra Señora del
Rosario. Volumen CLXI. Ciudad de Bogotá: Editora Guadalupe LTDA, 2003
RECTOR NICOLÁS GUZMÁN Y SOLANILLA
Nació en Santafé en el año 1638, hijo de don
Enrique de Guzmán Saavedra (1597) y de doña Agustina de Solanilla quienes se
casaron el 29 de abril de 1629.
Fue el colegial número XII de los quince colegiales
formales que ingresaron al claustro de primera fundación; se graduó de doctor
de teología, educado por los padres dominicos cuando estuvieron al frente de la
rectoría del Colegio Mayor.
Juan Peláez Sotelo fue electo Rector en
el año de 1666, y es elegido como su Vicerrector el doctor don Nicolas de Guzmán
Solanilla, quien desde el 18 de diciembre de 1665 hasta el 18 de diciembre de
1666 fue vicerrector y catedrático de artes, tres años más tarde en 1669 fue
catedrático de vísperas de sagrada Teología hasta 1670.
En 1668 termina el periodo rectoral para Enrique de Caldas Barbosa y es
elegido en su remplazo Nicolás de Guzmán y Solanilla, su periodo de rectorado
se dio de 1669 hasta 1670, su
acta de elección no quedo registrada, pero es supuesto que se debió realizar
según la costumbre el 18 de diciembre de 1668. Los colegiales formales de su
rectorado fueron nombrados durante el 2 de abril de 1669 por el presidente del
Nuevo Reino de Granada don Diego de Villalba y Toledo “como patrón” del Colegio
Mayor, a favor del maestro don José Rejón de Silva y Urquijo.
En 1671
fue cura propio de la parroquia de Santa Bárbara en Santafé, luego desde 1689
hasta 1695 fue cura de la catedral y un año más tarde 1696 ascendió a racionero
de la Catedral.
RECTOR NICOLAS FLOREZ DE ACUÑA
Nació en santa fe de bogota el 12 de septiembre de
1651. Hijo de don juan Flórez de Ocariz alcalde ordinario , escribano de cámara
y mayor de gobernación de la real cancillería del reino y encomendero de canipa
y minipi en la muzos por su mujer natural de san Lucas de Barrameda y de doña
Juana de acuña y Angulo natural de muzo.
Sus siete
hermanos todos rosaristas fueron: don José, francisco, tomas, Martin, Jerónimo,
Jacinto, Roquer (rector).
Don Nicolas
flores de acuña presento informaciones de nobleza y limpieza de sangreel 8 de
mayo de 1666 y entro al colegio mayor como colegial convictor . en 1667 recibió
el grado de maestro en artes y doctor en cánones. En 1699 se desempeño como
catedrático de prima de sagrados cánones. En 1677 fue rector interino de
octubre a noviembre. En 1688 era canónico doctoral y abogado de la real
audiencia. En 1707 fue regente de estudios. En 1708 fue tesorero y chantre de
la catedral de santa fe y luego fue vicario capitular.
El primer
rectorado (1677)
No existe el
acta de la elección, pero suponemos que fue elegido el 18 de diciembre de 1676;
fue rector durante todo el año de 1677.
Vicerrector
don José linares; consiliario colegial don francisco de caldas Barbosa y
Santiago ; consiliario colegial don cristobal marques de espinosa y Ávila;
consiliario colegial don cristobal Márquez de espinosa y Ávila ; consiliario
colegial don Gregorio cortes Vasconcelos; secretario informante colegial don
José Ramírez de pobeda.
A mediados
de mayo debido a ausentarse del colegio mayor y quedo como rector interior el
doctor cristobal de torres bravo, “quedo sustituyendolo por ausencia “
El segundo
rectorado ( 1687)
En 1687 fue
rector durante los meses de octubre y noviembre.
RECTOR ENRIQUE DE CALDAS BARBOSA Y SANTIAGO
EL PRIMER
RECTORADO
Fue elegido rector el 18 de
diciembre de 1667 hasta el 18 de diciembre de 1668. Durante el año de su
desempeño como rector se esmero tanto por el Colegio Mayor del Rosario que
recibió el agradecimiento de los colegiales quienes lo reeligieron luego.
Puesto que las constituciones del Colegio Mayor establecían que el patrono
debía subsanar los problemas financieros, el doctor Caldas solicito un auxilio
económico a la patrona del Colegio Mayor, la reina doña Mariana de Austria,
quien se hallaba como gobernadora. La reina le notifico al presidente de la
real audiencia que “por parte del Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario
se me ha representado la suma pobreza a que ha llegado por lo menos cabos de
sus rentas y que por esta causa no se podía acudir a la conservación y
permanencia de el, ni al reparo de sus edificios y que hubiese congrua para que
se leyesen todas las facultades de su concesión y que solo cursaban la de
filosofía, teología y jurisprudencia las cuales sustentaba y conservaba mas
aplicación que los colegiales tenían a las letras que el estipendio de las
cátedras por haberse consumado los efectos que para su paga estaban consignados”.
El auxilio económico llego años mas tarde.
EL
SEGUNDO RECTORADO
El 18 de
diciembre de 1670 los colegiales eligieron por segunda vez como rector al
doctor Enrique de Caldas Barbosa y Santiago, cura de la parroquia de la
catedral en Santafé. A comienzos de 1672 los colegiales debieron presentar una
solicitud al patrono del colegio mayor y presidente del nuevo reino de granada,
don fray Juan, arzobispo de Santafé, para que le concediera una dispensa de
residencia al doctor Caldas puesto que, en virtud de una disposición del
concilio de Trento, existía la prohibición de que los curas se ausentaran de
sus curatos ya que, de hacerlo, perderían el beneficio, y esa era la situación
del rector elegido, porque era cura propio de la catedral de Santafé. La dispensa
de residencia solicitada por el Colegio Mayor era solamente por el tiempo que
duraba el periodo del rector y según lo aseveraron el vicerrector, los
consiliarios y los quince colegiales presentes. Pero la razón más importante
para mantenerlo en la rectoría fue por tener largas experiencias en el mucho
amor con que mira al dicho colegio en la vigilancia y cuidado con que asiste.
Sin embargo, el arzobispo tenía serias dudas sobre si podría dar licencia, para
lo cual solicito la opinión de los conventos de predicadores, de San Agustín y
San Francisco los cuales respondieron de manera positiva, lo cual movió al
arzobispo a concederla la dispensa de residencia “para que pueda asistir como
rector elegido y nombrado de dicho Colegio los tres años de la dicha rectoría.
EL TECER RECTORADO
El 27 de noviembre de 1680 el vicerrector, consiliarios y los colegiales, le suplicaron al presidente del Nuevo Reino de Granada don Francisco Castillo de la Concha como patrono del Colegio, establecer el periodo de rector por trienios. El vicepatrono acepto y a partir de esa fecha el periodo del rector fue de tres años. El 7 de diciembre de 1680 el rey don Carlos II expidió una cedula real solicitando un informe sobre la situación del Colegio Mayor para socorrerlo con algún auxilio económico. El 15 de diciembre de 1681 el rector presento el informe al presidente gobernador y capitán general don Francisco Castillo de la Concha en el cual decía que “los catedráticos actuales son, el de prima de teología y cánones, vísperas de teología moral, artes liberales y gramática, el año pasado (1680) se leyó la cátedra se leyó la cátedra de instituta y por haber suspendido al catedrático los señores de esta Real Audiencia no se lee este año. Las rentas consignadas a estas cátedras de fundación son trescientos patacones, las de prima de teología cánones, leyes y medicina a doscientos patacones, las de vísperas a doscientos patacones y la de artes a ciento y cincuenta con lo que percibe los catedráticos, porque con la necesidad grande que padece el Colegio asisten por su fomento y de lo que hay les acude con alguna ayuda de consta de rector”. Durante el año de 1682 el Colegio Mayor siguió en la misma situación de pobreza ya que el auxilio económico vendría a ser efectivo años después. Al salir del rectorado se dirigió a Madrid como apoderado del Colegio Mayor.
miércoles, 23 de mayo de 2012
RECTOR FERNANDO ANTONIO CAMACHO DE GUZMAN
El 18 de octubre de 1698 presento informaciones de
nobleza y limpieza de sangre siendo admitido en el Colegio Mayor como colegial
porcionista. En 1699 obtuvo la beca de Tunja lo cual le acredito como colegial
formal, durante el segundo rectorado de Cristobal Torres Bravo.
En 1702, bajo el primer rectorado de Jacinto Roque
Florez de Acuña, Fernando Antonio es nombrado conciliario colegial. Y bajo su
segundo rectorado, 1708-1710, Fernando Antonio es nombrado vicerrector.
En 1707, con el titulo de doctor, se presento como
opositor para obtener la catedra de visperas de sagrada teologia. En ese mismo
año tambien ejercio como catedratico de artes, fue comisario apostolico y
subdelegado generalde la santa cruzada. En 1704, catedratico de artes hasta
1710, año en que fue ordenado sacerdote y entro al clero secular como
presbitero. Cura del pueblo de Gameza. Desde 1711 hasta 1714 fue rector por
primera vez. Siendo posteriormente catedratico hasta el año 1728 en el cual fue
nombrado nuevamente rector del Colegio Mayor hasta 1733.
Al finalizar su segundo rectorado, el 23 de octubre
de 1733, Fernando Antonio logro cumplir uno de los deseos del fundador, siendo
esta, que se dictara la primera catedra de medicina.
Aparentemente murio en el año 1753 cuando se
disponia a viajar a Santa Marta a ocupar el cargo de obispo.
RECTOR JACINTO ROQUE FLÓREZ DE ACUÑA
Nació
el 16 de Agosto de 1670 en Santafé. Sus hermanos fueron todos rosaristas; Juan
Francisco, Francisco, Martín Gerónimo, Tomás. Agustín y don Nicolás quien
también fue rector en 1677.
Jacinto
Roque ingresó al claustro como colegial formal en 1683, después de haber
presentado informaciones de nobleza y limpieza de sangre “donde cursó las artes
y sagrada teología en que se graduó de maestro y doctor en las facultades de
cánones y leyes en que obtuvo los grados de licenciado y doctor”. Recién
nombrado colegial fue elegido consiliario, cargo que ejerció, hasta 1684 como
era la costumbre. Vicerrector desde 1694 hasta 1695. En 1694 obtuvo por
oposición la cátedra de sagrados cánones por tres años, hasta 1696. En 1697 fue
nuevamente elegido vicerrector hasta 1698. Ocupo la rectoría en calidad de interino
desde enero hasta abril de 1697 y luego desde marzo hasta Octubre de 1698,
además fue catedrático del libro de sexto de decretales. En 1700 fue elegido
consiliario hasta 1701. En 1701, lo eligieron rector hasta 1704.
Primer Rectorado
(1701-1704)
(1701-1704)
1701-1702
Vicerrector y consiliario doctor Alberto López de Moscoso; consiliario doctor don José Cayetano de Valenzuela y Fajardo; consiliario doctor don Juan Andrés Manzanares y Juera; secretario informante don Feliciano Gonzalo de Manas y Riopa y Pérez de Corzo; secretario informante colegial don Bernardo Márquez.
Vicerrector y consiliario doctor Alberto López de Moscoso; consiliario doctor don José Cayetano de Valenzuela y Fajardo; consiliario doctor don Juan Andrés Manzanares y Juera; secretario informante don Feliciano Gonzalo de Manas y Riopa y Pérez de Corzo; secretario informante colegial don Bernardo Márquez.
1702-1703
Vicerrector don José Felipe Márquez de Urbina; consiliario doctor don Simón Chacón; consiliario colegial don Pedro de Balbín Negrón; consiliario colegial don Fernando Antonio Camacho de Guzmán y Rojas; secretario informante colegial don Bernardo de Márquez.
Vicerrector don José Felipe Márquez de Urbina; consiliario doctor don Simón Chacón; consiliario colegial don Pedro de Balbín Negrón; consiliario colegial don Fernando Antonio Camacho de Guzmán y Rojas; secretario informante colegial don Bernardo de Márquez.
1703-1704
Consiliario doctor don José de Manzanares y Juera; consiliario doctor don Lucas Camacho de Guzmán; consiliario colegial don Ignacio Sáez de San Pelayo; consiliario colegial maestro don Antonio Claudio de Briceto; secretario informante colegial don Tomás de Solórzano; secretario informante colegial maestro don José Zapata y Flórez.
Consiliario doctor don José de Manzanares y Juera; consiliario doctor don Lucas Camacho de Guzmán; consiliario colegial don Ignacio Sáez de San Pelayo; consiliario colegial maestro don Antonio Claudio de Briceto; secretario informante colegial don Tomás de Solórzano; secretario informante colegial maestro don José Zapata y Flórez.
El Segundo Rectorado
(1708-1710)
(1708-1710)
No
existe el acta de la elección. Fue rector desde 1708 hasta 1710.
1708
Consiliario doctor don Antonio Claudio Briceto; consiliario doctor don José Cayetano Zapata y Flórez; consiliario doctor don José de Ysabal; consiliario colegial don Nicolás Sanz de Santamaría Galeano; consiliario colegial maestro don Francisco José Flórez y Vanegas; consiliario colegial maestro don Bernardo Antonio Flórez y Vanegas; secretario informante doctor don Juan Eusebio Monasterio.
Consiliario doctor don Antonio Claudio Briceto; consiliario doctor don José Cayetano Zapata y Flórez; consiliario doctor don José de Ysabal; consiliario colegial don Nicolás Sanz de Santamaría Galeano; consiliario colegial maestro don Francisco José Flórez y Vanegas; consiliario colegial maestro don Bernardo Antonio Flórez y Vanegas; secretario informante doctor don Juan Eusebio Monasterio.
1708-1709
Vicerrector doctor don Fernando Antonio Camacho de Guzmán; consiliario colegial don Bernardo Antonio Flórez y Vanegas; consiliario colegial don Nicolás de Santamaría; secretario informante colegial maestro don José Flórez de Guzmán.
Vicerrector doctor don Fernando Antonio Camacho de Guzmán; consiliario colegial don Bernardo Antonio Flórez y Vanegas; consiliario colegial don Nicolás de Santamaría; secretario informante colegial maestro don José Flórez de Guzmán.
1709-1710
Consiliario colegial maestro don Juan Agustín Flórez y Vanegas; consiliario colegial maestro don José Flórez de Guzmán; consiliario colegial don Nicolás de Santamaría; consiliario doctor don Juan Eusebio de Monasterio; consiliario colegial maestro don Pedro de Herrera; consiliario doctor don Jacinto Roque de Guzmán y Tovar; consiliario colegial don Cristóbal de Luzaurzaval; secretario informante colegial don Francisco José Calvo Guzmán.
Consiliario colegial maestro don Juan Agustín Flórez y Vanegas; consiliario colegial maestro don José Flórez de Guzmán; consiliario colegial don Nicolás de Santamaría; consiliario doctor don Juan Eusebio de Monasterio; consiliario colegial maestro don Pedro de Herrera; consiliario doctor don Jacinto Roque de Guzmán y Tovar; consiliario colegial don Cristóbal de Luzaurzaval; secretario informante colegial don Francisco José Calvo Guzmán.
miércoles, 16 de mayo de 2012
LA ESTATUA DE FRAY CRISTÓBAL TORRES
“El bronce, en los
planes del hombre, sirve para perpetuar la memoria de los grandes; pero el
tiempo correo, toca las estatuas, las atierra primero y las reduce a polvo
enseguida. Y cuando de ésta que hoy hemos levantado no queden ni fragmentos,
subsistirá integrar la figura de Fray Cristóbal de Torres, en la memoria, en el
respeto, en la gratitud de las generaciones de entonces”. Rafael
María Carrasquilla (1909)
En
1906, cuando ocupaba el cargo de rector Rafael María Carrasquilla, la
consiliatura decide que es necesario crear una imagen representativa para la
universidad: la estatua de Fray Cristóbal de Torres. Inicialmente se pensó que
se podía hacer en Colombia pero el presidente, como patrono del colegio Mayor,
recomendó a un artista llamado Dionisio Renart
García, quien era un notable escultor nacido en Barcelona en 1878, inicialmente
conocido por las figuras religiosas, la estatutaria monumental y la
medallística. Sus obras se encuentran en diferentes sitios de España y América
y se destacó como escultor diestro en variados materiales[1].
Dionisio
nunca viene a América y como no había una imagen fiel para realizar la estatua,
le envían fotos de los cuadros de Fray Cristóbal que estaban en la Universidad,
esas fotos están referenciadas en el archivo histórico. El artista logra hacer
una representación con ellas y partiendo del concepto renacentista se hace la
escultura, en ella se recreo un personaje con varias características:
·
En la mano tiene las
constituciones que representan su gran creación del colegio Mayor, ya que Fray
Cristóbal escribió ese libro para dejar claro cómo iba a funcionar.
·
En la mano izquierda
tiene el rosario, porque era muy devoto a la virgen María y a este.
·
Firmeza de carácter en
el rostro.
·
Sentido ascensional por
los pliegues del vestido.
·
Gesto dulce y sereno en
la mano derecha: la mano derecha extendida habla de su generosidad, ya que dono
todo su capital para que de allí se produjeran los fondos suficientes para
crear el colegio mayor y para las becas.
·
Insinuación del
movimiento hacia adelante: el pie hacia adelante habla sobre la visión que
tenía Fray Cristóbal a futuro. El lema de la universidad está representado por
esa posición: Adelante en el tiempo.
En
agosto de 1909 llega finalmente la estatua a Bogotá. Su traslado se hizo por la
carretera de Cambao en un carro tirado por parejas bueyes pues el Ferrocarril
de Girardot había sufrido un daño grave. Se instalaron andamios y con una polea
se colocó la estatua sobre el pedestal, luego de aplicaron los escudos, se
grabo la inscripción y se plantó el jardín. La inauguración tuvo lugar el 10 de
octubre de 1909[2].
LA EXPEDICIÓN BOTÁNICA
Para poder entender la importancia de la Expedición Botánica hecha por José Celestino Mutis, es necesario reconocer los antecedentes educativos que precedieron a dicho proceso.
Fray
Cristóbal enseñaba en el claustro del Rosario según las materias impartidas en
Europa, medicina, teología y derecho. Sin embargo, la medicina no se pudo formar completamente
hasta la llegada de Mutis ya que no había médicos que impartieran la enseñanza
de esta ciencia.
Así
pues, el Virrey le manda a Fray Cristóbal al Sabio Mutis pero no con la
intención de que este se formara como educador sino como médico personal de
Fray Cristóbal. Mutis quien tenía conocimiento en medicina, ciencia y astronomía quedo
maravillado con la diversidad del nuevo continente y decide dar comienzo a la
expedición botánica como respuesta también a todo el proceso ilustrativo que se
está gestando en Europa con la aparición de la imprenta y el descubrimiento de
nuevas tierras.
El
Virrey le pide al rector del Colegio Mayor que no limitara la labor de Mutis
como doctor, sino que le diera permiso para ser profesor, es así como Mutis
comienza a impartir su cátedra de matemáticas y genera en sus estudiantes una
duda sobre la comprensión que tenían del mundo, estudiantes que después serian
sus discípulos y serian determinantes en el proceso libertador de Colombia.
España
necesita afianzar su poder sobre la colonias y ve en la Expedición Botánica una
oportunidad para reconocer la biodiversidad de su colina y de esta manera saber
de qué manera explotarla. Para llevar a cabo la expedición Mutis necesito de la
colaboración de pintores, botánicos, expertos en mineralogía, astrónomos, entre
otros para poder hacer un estudio riguroso y a escala real sobre la riqueza que
ostentaba la colonia y por ende España.
La
Expedición Botánica fue un proyecto científico y político. Científico porque
para poder llevar a cabo el proyecto Mutis tuvo que enseñarles a muchas
personas sobre las ciencias que él conocía sumado al avance respecto a
conocimiento que represento ducha exploración y político porque le permitió a
la corona afianzar el poder español en América.
EL GRABADO
El grabado comenzó a ser usado en América, gracias a la necesidad que tenían los españoles por convertir a los indígenas al catolicismo y recurrieron a la imágenes como forma de comunicación para impartir dicho conocimiento.
Puesto que la cantidad de cuadros era muy reducida y así mismo lo era la cantidad de pintores capaces de responder a la demanda de pinturas religiosas, la iglesia toma el método de grabar antes de pintar, grabados que se hacían en Bélgica, y dichos grabados llegaban en forma de estampas a la Nueva Granada lo que facilitaban su reproducción.
El grabado tiene su origen en China y es entendido como una técnica de dibujo, no de pintura, a través de una matriz en donde el artista hace el dibujo. El grabado consiste en una técnica de impresión con el fin de transferir y multiplicar una imagen ya que el original queda en la placa y con esta placa se hacen infinidad de copias.
Así pues, con el descubrimiento de América el grabado junto con la imprenta se hace muy importante, al permitir la publicación de libros con texto e imagines.
Existen diferentes tipos de grabado sobre el metal:
· Punta seca: con el punzón se hace una incisión en el metal, abriendo el metal en dos y haciendo que la tinta pinte la incisión y el reborde dando la impresión de sombra.
· Agua fuerte: es parecida al proceso de la punta seca, pero en vez de aplicar la tinta directamente, se aplica acido sobre la incisión hecha haciendo que esta se agrande. Es decir, se cubre la lamina con neme, pero no la incisión, se deposita la lámina en acido férrico y de esta manera la se va corroyendo la parte de la lamina donde se hizo la incisión por ende la línea queda más gruesa y profunda.
· Agua tinta: a diferencia del agua fuerte, la lámina no se cubre con neme sino con una capa de resina, produciendo una sensación diferente.
EL ARCHIVO HISTÓRICO
El Archivo Histórico de la Universidad del Rosario cuenta con un gran tesoro y es la posesión de más de 8.000 libros, muchos de ellos posesiones de los próceres de la independencia como Camilo Torres y otros del propio fundador de la universidad Fray Cristóbal de Torres.
En la salida al Archivo Histórico que realizamos en clase, tuvimos la oportunidad
de observar algunos libros con grabados, pero la importancia no se queda únicamente
en la forma del grabado, sino que gracias a él llegaron a la Universidad libros
de ciencias como anatomías, que permitieron el avance educativo de los estudiantes,
pese a las precarios ingresos que tenía la universidad para conseguir los
libros en esa epoca.
Los libros que nos mostraron se destacan por tener cubierta
de piel de cerdo, la mayoría son de más o menos 1.700 y en sus grabados se
destacan algunos por ser muy insinuantes para la época, como el libro de
anatomía que mostraba claramente los órganos genitales de los pacientes a los
cuales se le realizaba la autopsia.
Sin embargo, el tesoro más importante y que hace del Archivo Histórico un lugar invaluable, es la carta
firmada por el Rey de España, otorgando el permiso para la creación del Colegio
Mayor de Nuestra Señora del Rosario. Puesto que, es un documento al que no todo
el mundo tiene acceso y que tiene un peso histórico considerable e
incomparable.
BALTASAR DE FIGUEROA[1]
Nació en Santafé de Bogotá
en 1629. Hijo de Gaspar de Figueroa, alférez de las milicias como su padre,
discípulo suyo como pintor, regente y heredero del taller paterno y tan
acreditado o más que su progenitor. Baltasar de Vargas Figueroa, recibió numerosos
encargos de parroquias, comunidades religiosas y particulares, a los que con
frecuencia no pudo dar abasto.
Influencias
Maestro: Gaspar
de Figueroa (Papá). Formado en el taller de su padre, se
advierte en estos dos pintores una notable y estrecha relación, que dificulta
la correcta atribución de los cuadros que no están firmados, pues muchos de los
que se presume son de Gaspar, fueron terminados por su hijo. Los historiadores del arte aún no han realizado un
estudio documentado que permita distinguir las características formales de
Gaspar y de su hijo Baltasar de Vargas Figueroa, pues al trabajar los dos en un
mismo taller, en algunas obras se advierte la intervención de ambos, lo que
dificulta y confunde la atribución correspondiente
Otros
movimientos artísticos: sus obras denotan una
influencia zurbaranesca, lo cual significa un paso más hacia el naturalismo
barroco. La obra de Baltasar de Vargas Figueroa está influenciada por Zurbarán
(pintor español de temática religiosa, caracterizado por el empleo del claro
oscuro, el modelado rigurosos y la representación realista).
Estructura
Baltasar de Figueroa incurría en ciertos errores en la
proporción de las figuras, e igualmente era torpe en cuanto al trabajo de las
manos: no sólo se le dificultaba "cerrarlas", sino también darles
expresión. En cambio, las caras son en general muy delicadas y cuidadosas. Con
frecuencia repitió el mismo rostro en cuadros diferentes. Prestaba mucha
atención a los trajes, especialmente cuando éstos estaban elaborados con
brocados.
Como todos los pintores coloniales, Baltasar de Vargas se
sirvió de grabados europeos como modelos para sus pinturas.
Concepto
artístico
Color:
colores
ricos e intensos
Luz: utilizó el claroscuro, que consiste en el uso de contrastes fuertes entre
volúmenes, unos iluminados y otros ensombrecidos, para destacar más
efectivamente algunos elementos.
Temática:
Como era tradicional, sus temas fueron de carácter
religioso, aunque al lado de ellos se encuentran algunos retratos.
GASPAR DE FIGUEROA[1]
Nació en Mariquita, Tolima
en 1594. Activo
desde 1637, Figueroa se estableció en Santafé en su propio taller; además,
ocupó el cargo de alférez de milicias en Santafé de Bogotá. Puede
considerársele como el iniciador del género del retrato en la Nueva Granada, el
cual ejerció simultánea y conjuntamente con el de los temas religiosos. Con
Gaspar de Figueroa, la pintura neogranadina aún apegada a las fórmulas del
manierismo romanista, ya obsoletas en todas partes, avanza decididamente hacia
las nuevas fórmulas del barroco.
Influencias
Maestro:
Hijo del pintor sevillano Baltasar de
Figueroa "el Viejo". Se formó en el taller que fundó su padre en
Turmequé.
Otros
movimientos artísticos: Pintura neogranadina aun apegada a las formulas del
manierismo romanista.
Estructura
Como modelos para sus obras, Figueroa
utilizó numerosos grabados europeos.
Maneja mejor que su padre la anatomía, por
ejemplo, se esmera en el trabajo de las manos; pero le falta una mayor armonía
en la disposición de las figuras.
Concepto artístico
Color: su estilo es sobrio. Su color es atenuado, sin
mayores contrastes.
Luz: En
sus composiciones se destaca una figura central luminosa, rodeada de otras
menores.
Temática: Religión.
- Obras en la Universidad del Rosario: Una de sus mejores obras es el Retrato de Fray Cristóbal de Torres, que se encuentra en el Colegio Mayor de Nuestra Señora del Rosario de Bogotá. En él, los elaborados detalles de las joyas del fraile, los herrajes de su escritorio y las incrustaciones del marco del cuadro de la Virgen del Rosario que lo acompaña, contrastan con la sobriedad y elegancia de los hábitos y del' cortinaje que sirve de fondo a la escena. Por lo demás, el rostro es muy definido y las manos correctamente ejecutadas.
JOAQUÍN GUTIÉRREZ[1]
No se sabe con exactitud de dónde procedía su familia, ni el lugar y fecha de su nacimiento, el que se deduce debió ser hacia la segunda década del XVIII, pues las primeras obras que se le conocen fueron ejecutadas en 1750; su fecha de muerte se sitúa en los primeros años del siglo XIX. Vivió en Santafé de Bogotá, estudió pintura en el taller de Nicolás Banderas.
Gutiérrez fue un buen retratista que se
distinguió por la maestría con la que trató los trajes y la manera como
reprodujo las sedas y los encajes. Su estilo se apartó del barroquismo que
había primado durante los siglos anteriores en el Nuevo Reino de Granda. Este
artista, con su pintura de perspectiva plana y sin los contrastes violentos del
claroscuro, pertenece a la escuela Rococó que había de influir definitivamente
en los primeros pintores republicanos del siglo XIX.
Obras en la Universidad del Rosario:
- Retratos de los rectores:
- José Joaquín de León y Herrera
- José Masusteguin Calzado
- José Rafael Rigüe.
GREGORIO VÁZQUEZ DE ARCE Y CEBALLOS
Artista del siglo XVII,
mismo siglo en el que se funda el Colegio Mayor del Rosario. Retrataba
principalmente paisajes europeos debido a las estampas que llegaban
directamente de este sector geográfico, usaba un barniz (aceite que se aplica
en la pintura para proteger las pinturas) que hacia brillar sus pinturas,
actualmente este barniz ha dañado un poco sus cuadros puesto que no eran tan
procesados como los son hoy en día.
Siempre vivía
preocupado por buscar constantemente nuevos colores y nuevas fuentes para hacer
de su trabajo más diverso. No se basaba en la imagen como tal, sino en su representación,
en la significación más que en la composición.
Así pues, sus cuadros estaban marcados por jerarquías de querubines en
donde la virgen figura como lo más alto. La composición geométrica siempre está
en sus cuadros.
Al ser expulsado del
taller de Figueroa, supuestamente por haber superado a su maestro, lo hace sin
recursos económicos, por lo que comienza a leer muchos textos y a formar gran
afinidad con ciertos personajes europeos, los cuales empiezan a requerir de sus
servicios para pintar cuadros religiosos, igualmente la iglesia era uno de sus
mayores clientes, por ende su mayoría de obras son netamente religiosas. Muy
pocas obras no son de carácter religioso como el cuadro que hizo al rector de
la Universidad del Rosario Enrique de Caldas Barbosa.
El cuadro El juicio final hecho en 1673 que se
encuentra ubicado en la comunidad franciscana, representa la salvación y
condena de los hombres. Esta es una de las obras firmadas por Gregorio Vásquez
de las cerca de 900 atribuidas a él, factor importante, puesto que muchas obras
que se supone son de él no están firmadas. Es una obra de dimensiones muy
grandes, aproximadamente unos 7 metros de ancho y 3 de alto, el cual fue
restaurado para la exposición Abeas Corpus.
Posteriormente el grupo
exponente mostró un video, sobre una colección de Gregorio en donde resaltaron
aspectos como la composición geográfica y la jerarquización.
Enrique
de Caldas Barbosa
Se presume que la
pintura hecha por Gregorio de Enrique de Caldas Barbosa fue en su primer
mandato de los tres que tuvo. Santafereño, doctor en teología, colegial,
conciliar y rector de la Universidad del Rosario. Se dice que el mejor retrato
de Enrique es el hecho por Gregorio por la mirada tan diciente que captura,
también pintó a Jacinto Roque Flórez, y Nicolás Flórez de Acuña.
PABLO ANTONIO GARCÍA DEL CAMPO
Participe de la empresa de la expedición botánica de José Celestino Mutis, nace en el siglo XVIII y muere en el XIX, fue el ultimo retratista del siglo XVIII, discípulo de Joaquín Gutiérrez el cual estaba conectado con el taller de los Figueroa. A partir de él, se implementan figuras con más movimiento y detalles, no se conoce que un pintor hubiese estado tanto tiempo con Mutis como Pablo Antonio García. Fue nombrado como primer delineador de la exposición botánica, Mutis le pidió que dibujara las plantas en tamaño real y delineado.
También ensayo la
pintura religiosa, basada en estampas europeas de carácter religioso, pablo
Antonio sale de la exposición a los cuatro años de estar en ella debido a
problemas de salud, Mutis afirma que no tendrá pintores como él, en el momento
en que se va de la expedición recibe el titulo de pintor de cámara del
Arzobispo Virrey Don Antonio de Caballero y Góngora.
Hizo el retrato de Mutis,
en oleo sobre tela, en donde mostro una actitud natural de él en el retrato,
aparece sentado debido a su altura, tiene una característica ilustrada debido
al carácter científico del personaje. En este cuadro implementa el orden y
equilibrio en los retratos, Mutis esta a la izquierda y a la derecha el fondo
del cuadro en donde están los libros de mutis, telescopio (que no sabía cómo
era puesto que no había llegado aún a manos de Mutis), el globo celeste y el
globo terráqueo. El cuadro tiene elementos de influencia española y francesa,
como la pata de la mesa en donde se encuentra Mutis, al tener una pata de garra
de influencia básicamente española y la característica de la silla. Es un
cuadro más voluminoso, simple, con más color, toca el tema de una perspectiva
clara que antes no se encontraba en los cuadros del Rosario. Mutis, fue
catedrático mas no rector, no obstante aparece con la beca de los rectores de
la Universidad del Rosario en su cuadro.
Los cuadros no eran hechos en tiempo real, sino que el artista imagina una escena, en donde hace un bosquejo y luego hace el cuadro con los elementos que debe tener.
LA COMPOSICIÓN
Al terminar la exposición, vimos un video sobre la composición. En el video explicaron cómo se hace la composición de un cuadro, empezando por trazar una cruz en medio del cuadro, se añade medio cuadrado a lado y lado del cuadro original, luego se trazan las diagonales del cuadro central y las diagonales que quedaron del rectángulo exterior. Luego se trazan líneas al dividir el cuadro en tres, en donde quedan cuadros más pequeños y un techo en perspectiva. En el video se hizo la composición del cuadro de La última cenade Leonardo Da Vinci, en donde el relator del cuadro demuestra que nace un cuadro tan sorprendente de solo un cuadro y un rectángulo.
En todas las obras de los grandes maestros del pasado y los contemporáneos hay una composición geométrica, que permite comprender y leer los significados de la obra misma.
El segundo ejemplo fue hecho a partir de una pintura de Giotto, en donde la composición se basa en la relación reciproca entre el fondo y los personajes. El poder principal está en el centro en donde se establece casi siempre al personaje más importante y que tiene más significado.
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